" Nuestra Señora de la Dulce Espera, en la experiencia de tu maternidad protegida por el Espíritu Santo, has compartido nuestra esperanza, gloriosa junto a tu hijo Jesucristo, Salvador y Señor Nuestro, sabemos que quieres venir en nuestra ayuda.
Atiende esta súplica y protégenos en el momento en que confiadamente esperamos un hijo para que podamos aceptarlo con amor, educarlo en la fe católica y conducirlo con nuestro ejemplo hasta la casa de Dios Padre"